Aquí todavía no podía mostrar los ojitos lindos que tengo, ni sonreir como sonrío, ni hacer las monerías que empiezo a hacer... Pero hoy tenía ganas de echar un vistazo hacia atrás y fijarme en lo que era antes de venir a este mundo con toda mi presencia. Gracias, mami, por el calorcito.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario